La desbandada: el desastre
Guillermo Bañuelos
El PRI en Sinaloa quedó hecho añicos. Perdió la gubernatura y casi todas las posiciones en juego.
Gracias al sistema plurinominal, quizá alcance unas 8 diputaciones locales compartidas con los panistas y el PRD.
Morena lo apabulló junto al PAN y al PRD. Después de ello es difícil predecir el futuro de estos partidos, sobre todo del PRI.
Por lo pronto, como anuncio Mario Zamora la noche del día 6, la alianza Va por Sinaloa prepara recursos legales contra algunos incidentes que ocurrieron en la jornada, que, se dice, pudieron intimidar al votante priista.
Vendrá luego el análisis interno para determinar qué pasó. De la honestidad de este ejercicio dependerá lo que suceda en la consulta para decidir si se investiga o no a los ex presidentes, después en el refrendo o no de López Obrador y en los comicios del 2024
También es probable que en un plazo corto se ejecute una recomposición del comité estatal y de los comités municipales y se diseñe un plan de recuperación, lo que parece elemental, con el aval obligado del comité ejecutivo nacional.
La víspera anunció el desastre,. Algunos cuadros importantes abandonaron el barco y tomaron candidaturas de otros partidos; otras figuras relevantes se acomodaron encubierta o abiertamente en Morena. Quienes quedaron a bordo fueron derrotados.
Al final de la campaña, aquello parecía un recurso mediático más, que muchos calificamos como improbable. Cuando Rubén Rocha Moya proclamó que obtendría ‘carro completo’ (lo que logró algunas veces el PRI en sus días de vino y rosas), pensamos que era un recurso audaz de proselitismo. Pero al final casi lo logra.
La geografía política de Sinaloa cambió radicalmente. El mapa de la entidad es ahora una mancha color guinda con tonos morados, con apenas unos puntos rojos, azules o amarillos.
¿Qué sigue en el PRI Sinaloa?Suponemos que ni sus dirigentes, y menos aún los militantes, lo saben.
HABLA ‘ALITO’
La mañana del 7 de junio, Alejandro Moreno, Alito, dirigente nacional del PRI, exclamó que el 6 de junio “se detuvo a Morena” y se logró romper la mayoría calificada en la Cámara de Diputados. Describió que ‘el ánimo’ de la coalición es armar consensos y acuerdos en el Congreso de la Unión y construir mayorías para respaldar iniciativas “cuando sean buenas propuestas”. Y aseguró además que la alianza va “a defender cada uno de los votos de los mexicanos”. Ojalá. Alito, se deduce, va de frente al frente de su partido.
Es imposible ocultar que antes y durante la jornada, en un número indeterminado de distritos del país, reaparecieron prácticas primitivas (robo de urnas, supuesta compra de votos, privación de libertad y hasta el asesinato de más de 80 personas involucradas en el proceso). El INE, que justificó plenamente su existencia con una excelente organización de las elecciones, está obligado a investigar y sancionar estas expresiones de un pasado remoto que creíamos desterradas. Era, ya vimos, una ilusión.