* La calle repleta de gritos y banderas, Mario Zamora sabe que nada ha sido en vano, que todo valdrá la pena. Sinaloa lo vale. Sinaloa es la pieza principal de este sueño de miles.

Jornada de propuestas para el abanderado del PRI, PAN y PRD. Casi todo está dicho en la recta final del proceso electoral 2021.

Alto frente a todo esto que le falta nombre, pero no alma ni emoción ni entrega. Alto frente a mujeres, hombres y jóvenes, Mario Zamora ya vislumbra el Sinaloa del siglo XXI.

“Llegó la hora de pensar en grande, del tamaño que es el corazón de los sinaloenses. Es el momento de nuestra generación”.

Lo vuelven a llevar en hombros, como en aquel primer debate organizado por el Instituto Electoral. Y Mario Zamora se palmea el pecho: con el gesto agradece a todos en la noche alta de este mayo sinaloense, en la víspera de la elección, a días de volver a apretar y alzar los puños.

Porque allí de pie el candidato de la alianza Va por Sinaloa sigue creciendo. Porque allí sin moverse va para arriba. Allí de pie sigue tan alto, como el que alcanza a ver más allá, después del horizonte.

Porque allí sigue creyendo en su gente, su Sinaloa, su proyecto. Allí de pie, las luces en el rostro, en su estado natural.

“Ha quedado muy claro: Zamora gobernador. Ustedes son la base de nuestra campaña, nuestra energía, nuestro ejemplo. Y vamos a hacer que valga la pena este esfuerzo, estas ganas. Su sudor, su vibra. Vamos a hacer que valga la pena haciendo el gobierno que todos ustedes se merecen”.

Faltan ocho días para la conclusión de la campaña. Solo queda 12 días para la elección.

“A todos ustedes mi corazón, mi agradecimiento”.

Los suyos gritan y aplauden. Lo siguen en su camino al camión de la victoria. Se oyen los gritos: ¡Mario gobernador, Mario gobernador, Mario gobernador!

¡Aquí, allá, Zamora va a ganar! ¡Aquí, allá, Zamora va a ganar!

Alto, con la talla de los que rozan el 1.90, Mario Zamora ya espera el 6 de junio. Alto, con la talla del gigante.