*Eso de andar queriendo hacer crecer a un tercero es “darse un tiro en el pie”, manifestó el candidato a diputado federal por el séptimo distrito

No se equivoquen al votar, la pelea es entre dos, y la mejor es Xóchitl Gálvez, eso de andar queriendo hacer crecer a un tercero es “darse un tiro en el pie”, manifestó Noé Heredia, candidato a diputado federal por el séptimo distrito, por la coalición Corazón y Fuerza por México.

Ante comerciantes y padres de familia de las colonias Tierra Blanca y Burócrata, les pidió analizar muy bien los perfiles de los candidatos y candidatas, para que no les vuelvan a engañar de nuevo, que voten por quienes en verdad les puedan representar y no por aquellos que buscan la reelección sin haber trabajado nunca.

Hay mucha gente bien arrepentida, señaló Noé Heredia, porque votaron por el hoy presidente de la república, diputados federales y senadores, entre otros, sin hacer diferencia, sin analizar ni razonar el voto y hoy están sumamente molestos por la gran traición recibida, pues tenemos un gobierno federal miserable y ruin, que no le importa la ciudadanía.

“Dijo, señaló el candidato, que iba a cambiar todo, y si, dejó lo más peor y podrido y tiene en la ruina, la pobreza y la indefensión a la ciudadanía”.

En su recorrido para saludar y dialogar con comerciantes, recibió la queja de la falta de ventas en fechas recientes como fue el día del niño y el día de las madres, “sólo los restaurantes estuvieron llenos, ni en las plazas se vieron los clientes de antes”.

“No hay dinero, y en mucho es generado por la ingobernabilidad y falta de oficio de las autoridades de los tres niveles de gobierno, lo que ha generado pésimas políticas económicas, desataron la inflación en todo el país y suspendieron los apoyos a los empresarios y comerciantes que desean hacer crecer su negocio”, dijo Noé Heredia.

Cada día, agrega, los empresarios y comerciantes pagan más en impuestos, insumos y sueldos, y los ingresos son menores, y los gobiernos no brindan apoyo alguno, y los créditos bancarios están muy elevados, el adquirirlos significa poner en riesgo el patrimonio familiar.