Robespierre Lizárraga, también es un acusado y estará en un alto cargo en la UAS: Jorge Ibarra
*Se trata de una estrategia política señala el docente y comunicador y dice que es una irresponsabilidad pensar en parar labores en la casa rosalina
Jorge Ibarra Martínez, docente de la Facultad de Estudios Internacionales y Políticas Públicas, calificó como una estrategia política el hecho de que Robespierre Lizárraga, fuera designado Secretario General de la Universidad Autónoma de Sinaloa, ya que dijo que se trata de un acusado más a quien se le sigue un proceso penal y queda en un alto cargo de la esa casa rosalina.
De la misma forma el también comunicador dijo que es una irresponsabilidad pensar en parar labores y los universitarios deben mostrar su diversidad de opinión, consideró el académico.
“Tras la renuncia de Gerardo Alapizco Castro, quien dejó el cargo para atender problemas de salud de su cónyuge, el nombramiento de Robespierre Lizárraga Otero a la Secretaría General de la UAS es una clara estrategia política que no debería darse”, dijo el docente.
De la misma forma señaló que los universitarios desean ver que este tipo de cambios se desarrollen apegados al estado de derecho y en este sentido, resulta contradictorio que ante la posibilidad de que el Rector Jesús Madueña Molina sea separado de su cargo por los señalamientos penales en su contra, se nombre a una persona que también está acusada dentro de los mismos procesos.
Ibarra Martínez, planteó que el Consejo Universitario debería convocar a una consulta para decidir quién es la persona indicada para asumir el control de esta institución educativa.
“Tendrá claro la Fiscalía que demostrar con evidencias y con el debido proceso, que es culpable de lo que se le imputa, pero quedará otra vez en el principal cargo de la universidad una persona que está siendo acusada y yo creo que esto no beneficia mucho en la salud universitaria, debiera yo creo que en el corto plazo, el Consejo Universitario, llamar a una consulta para ver quién será la persona indicada para retomar el control de la universidad”, señaló el académico.
Al referirse a las protestas que se han realizado en diferentes puntos del estado en una presunta “defensa de la autonomía universitaria” y la advertencia de que se paralizará todo el estado en caso de que Madueña Molina sea separado de su cargo, Ibarra Martínez expresó que si bien las voces de esos universitarios son legítimas y tienen el derecho de expresar su inconformidad, no son las únicas voces, ya que existe una sociedad sinaloense que confía en el cuerpo académico y su razonamiento crítico, por lo que es momento que se alze la voz y se demuestre la diversidad de opiniones que existen al interior, ya que es una total irresponsabilidad considerar esa posibilidad, concluyó el columnista.