ESTATAL

Cuando hay niños felices hay una mejor sociedad: Zamora

Mario Zamora, junto con su esposa Wendy Ibarra, se dispuso a hablar con las y los que no votan. Emprendía un diálogo diferente, atípico para un candidato en plena campaña política.

Y aunque aquellas y aquellos subidos a su camión de campaña no votarán este 6 de junio, el próximo gobernador de Sinaloa se interesó en sus ideas, inquietudes y peticiones.

Ahí durante el encuentro programado por Wendy Ibarra, su esposa, la charla fluyó motivada por las libertades de cada quien, por la espontaneidad y franqueza.

Ahí, durante el encuentro que se extendió por más de una hora, los deportistas le dijeron que cuando sea gobernador de Sinaloa destine recursos para las canchas, estadios y otros espacios de las diferentes disciplinas.

María Regina era de las más inquietas. Le gusta el baile en sillas de ruedas y actualmente se prepara para participar en unas Preolimpiadas.

Pánfilo seguía el diálogo. Es beisbolista de talla baja.

Ahí los artistas también pidieron apoyos para su actividad. El canto, el baile, la música, la pintura, las artes.

Valeria había dejado el violín en casa. Se interesaba por la charla. Es integrante de la Orquesta Sinfónica y Coro Infantil y Juvenil de Los Mochis.

A Hannah le apasiona el canto, el teatro y escribir.

Ahí las mujeres alzaron la voz. “Que no sea tan brusco con las mujeres porque todos podemos hacer lo mismo”.

Fátima llegó al diálogo con Mario Zamora desde Sinaloa de Leyva. Quiere participar en política. Quiere ser presidenta municipal.

Las escuelas, las escuelas de la pandemia fueron puestas en la charla. Pidieron condiciones seguras para el retorno y becas para los alumnos. Wendy Ibarra les explicó el programa de becas que Mario Zamora emprenderá desde el gobierno de Sinaloa.

Enrique, de 17 años, también estaba presente. Es el primer sinaloense nominado al International Children’s Peace Prize 2020 por su labor como promotor sobre los derechos de las niñas, niños y adolescentes en escuelas de alto nivel de marginación y violencia.

Mario Zamora y Wendy Ibarra les daban su lugar. La plática era abierta, amena, de ida y vuelta. Era el candidato a gobernador de la coalición Va por Sinaloa con las y los que no votan.

Mario Zamora concluyó con un mensaje sentido. Las y los que no votan le habían tocado su lado sensible:

“Todo nuestro compromiso de que los próximos seis años tengan más oportunidades y dejarles un mejor lugar para vivir. Hacer todo el esfuerzo para que sigan siendo felices. Cuando hay niños felices hay una mejor sociedad”.