HAY QUE DECIRLO
*“No voy a cambiar mi actitud”, el claro mensaje de Rocha Moya a autoridades de la UAS
*No he sido convocado, pero si se da la reunión mi postura será la misma, dice gobernador
*Mejor nos olvidamos de eso de “mejor que en Dinamarca”, faltan 3 meses y todo está peor
*Quitaron el Seguro Popular y crearon el INSABI que fracaso, ahora crean “La Clínica es Nuestra” y ojalá no sea como “La Escuela es Nuestra” que no está dando los resultados esperados
Por Arnulfo Torres
Muy claro fue el mensaje que el gobernador Rubén Rocha Moya envió la mañana de ayer en su conferencia Semanera a las autoridades universitarias, al señalar en primer lugar que él no ha sido convocado a ninguna reunión en Gobernación y segundo que su postura sigue firme en combatir la corrupción que se da al interior de la UAS.
“No he sido convocado, pero si se da, yo estoy de acuerdo con lo que dijo el presidente, sobre el respeto a la legalidad y sin que se tolere la corrupción”, fueron las palabras de Rocha Moya, es decir que, si la reunión se realiza, los procesos penales seguirán su curso.
Otra de las cosas que dejo claro Rocha Moya fue que no va a cambiar su actitud, que va a seguir apoyando a la universidad, “para los padres, los estudiantes y los trabajadores, voy a seguir apoyando a la universidad como nadie lo ha hecho”.
Pero dijo también que seguirá combatiendo a la corrupción, “no lo estoy haciendo yo directamente, los está haciendo la institución que compete por la vía de la legalidad”.
“Me dicen que cambien de actitud, pero si cambió de actitud y nos les apoyo, pues no les pagan los salarios a los trabajadores de la UAS porque según se dice se roban el dinero con el que debieran de pagar”, indicó.
Con todo lo anterior, si se llegase a dar una reunión entre autoridades de la UAS el gobernador Rocha Moya ya la Secretaria de Gobernación, no creemos que las cosas cambien porque las posturas de las partes están bien definidas, principalmente la del mandatario estatal.
Así las cosas, pendientes con este tema.
CREO QUE YA NOS TENEMOS que olvidar de eso de que México iba a tener un sistema de salud mejor que Dinamarca, porque a tres meses de terminar el mandato Andrés Manuel López Obrador, el sistema de salud en México sigue igual y cada día peor.
Las quejas de los ciudadanos en diferentes ciudades del país siguen creciendo ante la falta de medicinas, el mal estado de las unidades de salud, llámense clínicas, hospitales o Centros de Salud.
Los padres de niños con cáncer tienen mucho tiempo en su lucha para obtener medicamentos para sus hijos sin que esto se halla solucionado y no se ve un futuro para que se solucione.
Las quejas de los derechohabientes del IMSS e ISSSTE son todos los días, por la falta de medicamentos y atención de médicos especialistas oportuna, pero el colmo de todo esto es el deterioro de clínicas y hospitales en donde los pacientes sufren por el mal estado de las camas, la falta de aire acondicionado y los accidentes en elevadores que ya ha costado la vida de derechohabientes y de los propios trabajadores del sector salud.
El gobierno de AMLO desapareció el Seguro Popular porque dijo que había corrupción, pero nunca lo comprobó, creó el INSABI que fue un verdadero fracaso, construyó una Mega Farmacia que a la fecha no funciona como se dijo.
Ahora AMLO se saca de la manga el programa “La Clínica es Nuestra” con la que pretende endosar a los ciudadanos el compromiso de que sean ellos los que se encarguen de las compras de medicamentos y equipos, además y todo lo que se relaciones con los Centros de Salud que hay en cada comunidad del país.
Este nuevo programa del Gobierno Federal nos recordó al también creado por el mismo gobierno de AMLO llamado “La Escuela es Nuestra” que sustituyo a las “Escuelas de Tiempo Completo” que tanto éxito tenían y que el presidente también desapareció porque había corrupción, pero tampoco lo comprobó.
“La Escuela es Nuestra” no esta dando resultados y lo decimos porque persisten las denuncias de los padres de familia de las enormes carencias que hay en la mayoría de las escuelas desde lo más básico que es el agua potable, electricidad, hasta la falta de aires acondicionados, sin dejar de lado el temor de muchos padres que los techos de las escuelas literalmente caigan encima de sus hijos.
Ojalá que en pocos meses no tengamos que escribir que “La Clinica es Nuestra” también resulto ser un verdadero fracaso.
Al tiempo.